Mantener las escuelas cerradas implica perder el potencial de toda una generación y, en consecuencia, poner en riesgo el futuro de nuestro país. En Argentina, se proyecta que cerca de 1.5 millones de estudiantes de los distintos niveles educativos se verán desvinculados de la escolarización.
Las fundaciones políticas de Juntos por el Cambio, Fundación Alem (Unión Cívica Radical), Pensar (PRO) y el Instituto Hannah Arendt (Coalición Cívica), seguimos trabajando en conjunto para el futuro de nuestro país.
Convencidos de que mantener las escuelas cerradas implica perder el potencial de toda una generación y, en consecuencia, poner en riesgo ese futuro, compartimos los puntos centrales del documento que elaboramos:
1- La educación es un derecho humano
Es deber del Estado garantizar su pleno cumplimiento.
2- Mantener las escuelas cerradas: una catástrofe educativa
Los cierres escolares pueden implicar que muchos niños abandonen para siempre sus estudios. De hecho, en Argentina se proyecta que millones de estudiantes de los distintos niveles educativos abandonen sus estudios.
3- La escuela es un lugar seguro
La evidencia científica indica que hay que volver a las aulas. La escuela es un lugar seguro si se toman las medidas necesarias.
4- Prioridades: es hora de concentrarse en los niños y los adolescentes
Es evidente que hasta el momento en Argentina el criterio de apertura de actividades se enfocó en favorecer a los adultos. Si se pudieron abrir bares y casinos, entonces se pueden volver a abrir las aulas.
5- Los efectos en los niños
Pérdida de aprendizajes, trastornos del sueño, de alimentación, depresión, angustia, entre otros problemas están afectando a los niños y adolescentes. Las escuelas son centros de actividad social e interacción humana. Cuando cierran, muchos niños y jóvenes pierden el contacto social que es esencial para el aprendizaje y desarrollo.
6- La virtualidad no alcanza
Además de los problemas para acceder a Internet o a dispositivos móviles, la educación a distancia genera desigualdad social y resulta insuficiente.
7- Padres, madres, docentes y alumnos quieren que se abran las escuelas
No es verdad que los docentes, padres, madres y alumnos se oponen a la presencialidad. Hay numerosas cartas de peticiones circulando por todo el país donde los argentinos piden que se reabran las escuelas.
8- Mujeres: las más perjudicadas
Las madres con niños pequeños parecen verse particularmente afectadas. Las cifras son alarmantes: el 84% de las madres de niños pequeños participan en la educación remota de sus hijos en los hogares, en comparación con solo el 6% de los padres.
9- La falta de infraestructura no puede ser un freno
Hubo un año entero para preparar las escuelas. Hay 51 mil millones de pesos en el presupuesto nacional de educación para ello, 20 mil millones para educación básica y 31 mil millones para jardines. Esta ejecución presupuestaria debe ser inminente.